ANAS Y MÍAS, NO ESTÁIS SOLAS

Anas, Mías, bailarinas, soñadoras y princesas, y todas las que aspiráis a ser perfectas, confiamos en que podáis serlo. Tenemos fe en vosotras. Otros os darán de lado, condenarán vuestra actitud y os llamaran locas. Otros se cebarán con vuestra inseguridad y reirán a vuestra costa. Otros se aprovecharán de vuestros miedos llenándose los bolsillos con ellos. Pero nosotros no somos así. No somos así.
Nosotros os entendemos, sabemos que sólo queréis ser especiales en un mundo que os tiene en soledad. Sabemos que tan solo buscáis el espejismo de lo que creéis que os hará felices. Sabemos que sois el fruto de esta sociedad imperfecta, los descosidos de una humanidad que ha perdido el norte, y por eso queremos ayudaros. Queremos ayudaros a salir de ese pozo que os oprime, exprimiéndoos hasta los huesos. Queremos demostraros que la perfección está muy lejos de dónde la buscáis. Queremos que aprendáis a quereros a vosotras mismas, que os aceptéis como sois. Pero de nada sirven estos clichés que ya habéis escuchado mil veces, ¿verdad?
Ante todo, sabed que no estáis solas, que aunque la gente que os rodea intente hundiros y sintáis que no tenéis con quien hablar, o que a nadie le importan vuestros sentimientos y problemas, estamos aquí para escucharos. Estoy aquí y te escucho.
Te escucho y te apoyo de una manera en la que nadie lo había hecho antes. Apoyo no es darte fuerzas para resistir la tentación de comer, apoyo es darte fuerzas para soportar los comentarios que te hieren. Apoyo no es ayudarte a ocultar tus desordenes alimenticios a los ojos de tu familia, apoyo es enseñarte a reconocerlos y pedir ayuda para curarlos. Apoyo no es compartir una dieta que ayudará a adelgazar antes, apoyo es mostrarte la belleza de un cuerpo sano y equilibrado.
Y es que Ana y Mía pueden parecer vuestras amigas, pero no lo son. Las amigas de verdad no te hacen daño, ni se quedan mirando como sufres. Las amigas de verdad no te juzgan por como eres ni te obligan a cambiar. Las amigas de verdad no te castigan por tus errores ni ponen en riesgo tu vida.
Sufrís junto a ellas para ser mejores, creéis que os ayudarán a ser perfectas, pero buscáis la perfección en el sitio equivocado. Para ser una princesa hay que poder soportar el peso de la corona, y la entereza para hacerlo no se encuentra en la delgadez. La perfección viene de la mano de la felicidad. La perfección es aceptar lo que tenemos y disfrutarlo. La perfección pasa por no negarse nada ni tener miedo ni prejuicios. La perfección es no arrepentirse jamás de lo que hacemos.
Coged nuestra mano, aceptad nuestro apoyo, porque al otro lado sólo hay un valle de lágrimas, dolor, enfermedad y muerte, sueños rotos y objetivos que nunca se cumplirán. Abandonando a Ana y a Mía no estáis fracasando en vuestro propósito, estáis eligiendo, marcando las reglas del juego, volviéndoos libres. Y recordad, no estáis solas.

Esta es una iniciativa impulsada por el vloggero Haplo F. Shaffer, que con la colaboración de otros mucho youtubbers y gente que no lo son, hicieron este vídeo colaborativo mostrando su ayuda a todas aquellas que sufren por Ana y Mía y habilitaron este email para todas aquellas que realmente quieran ser apoyadas en su camino atrás.